30 junio, 2006

24 de octubre de 1.951


29 junio, 2006

María Josefa Clavijo de la Vega

Datos, datos, hasta ahora todo lo que voy escribiendo son datos, fechas situaciones normales pero en este capitulo quiero dejar escrito sentimientos. Mi abuelita me dejo sentimientos, ¿como puedo dejar aquí escrito esas cosas?, ¿Cómo puedo dejar escrito tantas y tantas cosas que me enseño?, Es tan difícil transmitiros a los que no la llegasteis a conocer de cerca o a los que ya no la conocisteis ni de cerca como era esa mujer. Es muy duro recordarla, porque mi amor hacia ella es tan fuerte todavía en estos momentos que es muy difícil expresar lo que siento.

Analicemos lo que paso ella en su vida y luego apreciemos como era de mayor. Cómo una persona que había sufrido tanto y tanto y tanto, siempre tuviera una sonrisa permanente para quien le hablara, unos brazos permanentes para acunar a u bebé y un hombro de consuelo para dejar que alguien llorara en su regazo.

Traumas, lo que se dice traumas los debió de pasar todos, ahora que se habla tanto de ellos de los que se sufren en la infancia o en la adolescencia y decimos que nos quedan marcados para toda la vida.

Pues empecemos a analizar. Se mueren sus padres siendo ella niña. Deja todo, todo lo que tenía a su alrededor, hermanos, amigos, costumbres, para irse a vivir a casa de sus suegros con tres cuñadas que la acompañaran la mayor parte de su vida. Su marido no para en casa, va de guerra a guerra y de casino a casino, bueno algo tenía que parar, pues la verdad es que se quedó embarazada 18 veces, pero como ella misma decía “mi mario se baja los pantalones y ya me he quedado embarazada”, sufre por él ,es celosa y con motivos, pero ella no lo revelará jamás, por eso ella “machista recalcitrante”, nos dice que al hombre hay que cuidarle, además todo los días por la mañana lo primero que hacía era leer el periódico pues “había que estar al tanto de las noticias para tener conversación con tu marido”. Se baña por las noches, se echa polvos de talco por todo su cuerpo para dormir y meterse en la cama con él, limpia de olores de cocina y agradarle. Una mujer no se puede ir a la cama con rulos, “eso echa de casa a los maridos”, hay que ser “mujer en la mesa y amante en la cama”. Entierra a Petruqui su segundo niño y primera niña. Entierra a su cuarto hijo Juan. Entierra a su quinto hijo y segunda niña, María Josefa. Entierra a un sexto niño que nace con el corazón abierto. El último hijo que tiene y que ocupa el lugar del número trece, Quíquín, nace sietemesino y lo saca adelante como puede, este niño de mayor coge una leucemia y se muere a la edad de veinticinco años. Las tías se llevan a Toni y hasta que pasan tres años no lo ve ni sabe nada de él en plena guerra civil española. En el año 1937, su hijo mayor que en ese momento había cumplido dieciocho años, se va a la guerra embriagado por ese amor a la “Patria” y le matan. Con cincuenta y nueve años se queda viuda, viuda de un hombre al que adoraba, amaba y veneraba, hasta esa fecha ese amor lo tiene que compartir con las tres hermanitas de su marido, y digo bien compartir, ya que por “temor” a los celos de ellas y "a sus represalias" no puede tener ni un momento de descanso ni una palabra de amor de él hacía ella ni de ella hacía él, los dos estaban dominados en ese sentido por ellas y ¿cómo no se rebelaba?, ¿Cómo lo consintió?, por la paz, por que haya paz por …Cuidó a su suegra sola. La Tía Mercedes, se había ido con su hermana Margarita, casada con el Tío Daniel, a Toledo y a sabiendas que su madre estaba mal, no quiso regresar a Melilla para cuidarla. La otra hermana, la Tata, que se había quedado en Melilla y que vivía con ellos, no la podía cuidar puesto que nuestra bisabuela tenía un cáncer de matriz y ella “era soltera”, y claro “de esas cosas no entendía”. Cargada, de niños, embarazada al mismo tiempo, viendo morirse a otro niño José María mientras su suegra también se moría. Teniendo que lavar a mano toda “la sangre” que la pobrecita abuelita (nuestra bisabuela) manchaba, “a mano”, porque las moras que tenía de ayuda no querían tocar la sangre, decían que ellas eso no lo tocaban.

Siempre con un miedo en el cuerpo de que los moros aparecieran de un momento a otro a conquistar los territorios que los españoles habían conquistado. Siempre mirando a los montes a ver si aparecían luces y eso era señal de que se preparaban para atacarles entonces en los momentos que veía de más peligro, poniendo a cada niño una cintita con su nombre por si pasaba algo que no se perdieran y supieran quienes eran. Siempre esperando a su marido que venía de luchar, y dando gracias a Dios de que llegaba, por fin había llegado su amor.
Maríamercedes

28 junio, 2006

Cartas de la familia

Cartas escritas el 4 de agosto de 1.937 y que el destinatario, José Alberto Sisí Clavijo, nunca recibió, murió el 6 de septiembre siguiente. Sus padres las recibieron devueltas el 28 de abril de 1.938 por paradero DESCONOCIDO.

22 de mayo de 1.974


25 años después:

26 de junio de 1.994

Isabel

27 junio, 2006

Boda en Madrid

Boda de Jaime y Afsoon

Viernes, 21 de octubre, el viaje de ida
A las tres cogemos el tren y en poco menos de cuatro horas y media llegamos a la estación de Atocha, donde nos recibe José Antonio, con los billetes preparados del tren de cercanías que nos llevaría a la parada de Valdelafuentes, Alcobendas, nuestro destino.

En Alcobendas nos estaba esperando Jaime, quién nos lleva, a unos directamente a la casa donde ese iba a celebrar la “fiesta del día anterior” y a los otros, al hotel Amura.

Nos deja en el hotel, nos espera y nos lleva también a la “fiesta del día anterior“.

La fiesta del día anterior
Un encuentro muy feliz con la familia, muchos abrazos, muchos besos, mucha alegría.

A los novios se les ve muy felices, contentos, ambos se muestran encantadores, nos explican como se va a desarrollar la ceremonia iraní.

La Teniente Birra insiste, tenéis que probar mis tortillas que para eso me he pasado toda la tarde haciéndolas.

Después de pasarlo muy bien, nos vamos despidiendo, mañana es la gran fiesta y todo el mundo quiere estar fresco, Afsson nos acerca al hotel, ¡otro detallazo!.

Sábado, 22 de octubre
En el hotel nos recoge un autobús, en el que ya están Mary Pepa, Memes y Conchita, la tres guapísimas y muy elegantes, ¡quieren competir con la Reina de Inglaterra!.

Pasamos por la Moraleja para recoger a más invitados y Keka, la novia de Pablo, nos va explicando amablemente, cual guía experta, diversos aspectos de la ceremonia a la que vamos a asistir.

El lugar
La Antigua Fabrica de Harinas de Torremocha de Jarama, un conjunto de edificaciones que datan del siglo XIV.

La ceremonia
El Alcalde de Torrelaguna celebra el matrimonio civil y a continuación se celebra la ceremonia iraní.

La ceremonia iraní pertenece a la tradición Zoroástrica. La ceremonia tiene lugar en un salón adornado con flores y el “ sofreh aghed”, mantel bordado con diversos motivos simbólicos.

- Espejo con velas a ambos lados iluminando, representa el fuego y la luz.
- Pan tradicional para que haya banquetes abundantes.
- Monedas de oro, simbolizan la prosperidad económica.
- Miel, azúcar cristalizado y dulces iraníes para endulzar la vida de los novios.
- Esphand, incienso persa, se quema para purificar el ambiente y alejar el mal de ojo.
- Agua de rosas para perfumar el ambiente.
- Arroz, frutos secos y huevos simbolizan la fertilidad y la abundancia.
- Fuente con pan, queso y hierbas frescas para que haya abundancia.
- Flores para que la belleza adorne el matrimonio.
- Libro del poeta clásico iraní Hafez.

Los novios tiene cada uno dos testigos. El Maestro de ceremonia confirma, con los padres de los novios, que quieren proceder con la ceremonia y no tienen objeciones. Primero se pregunta al novio si desea casarse; después se le realiza a la novia la misma pregunta. Se repite hasta tres veces y cada vez las mujeres contestan “la novia se ha ido a recoger flores” o frases similares. En la última pregunta la madre del novio pone la mano de la novia una moneda de oro y este responde afirmativamente.

Durante la ceremonia las mujeres felizmente casadas sujetan un velo sobre la cabeza de los novios. Dos piezas cónicas de azúcar cristalizado se frotan para que el azúcar caiga sobre el tejido y endulce la vida a los novios. A la vez se hilvana con una aguja y siete hilo de colores el velo que cubre a los novios para cerrar la boca de quienes hacen comentarios maliciosos. Después de pronunciarse marido y mujer juntaran sus manos y tomaran miel para endulzar su vida. Al levantarse del “Sofreh” la esposa apagará las velas con el tacón de su zapato para indicar que ella siempre tendrá la última palabra.

Jaime , habla a los novios, directo al corazón, un discurso cargado de emoción, hay que cargar la mochila, dice entre otras cosas, cuanto más mejor, de muchas cosas alegres y bonitas, para sacarlas cuando surjan dificultades.

El festejo
Aparece un camarero con una bandeja de delicatessen, otro con otra bandeja de bebidas variadas y así, cien más, una y otra vez, sorpresa tras sorpresa.

tacos de salmón marinado con salsa mentidero,
puntas de espárragos verdes de sal gorda,
crujientes de morcilla con salsa de miel,
jamón ibérico de bellota,
tostas de foie y jamón de pato a la fruta de la pasión,
vieiras fundido sobre cebolla caramelizada,
steak tartare con trufas negras,
crujientes de chistorra con sésamo tostado
y croquetas de asado en su jugo
La comida, igual de genial que el cocktail, platos de diseño contentaron los paladares más exigentes, acompañados por vinos blancos y tintos, cargados de excelentes aromas y sabores.

crema de calabaza con jamón ibérico y langosta,
vino blanco, Canals y Nubiola Sauvignon
copita de mango y maracuyá con foie
pularda rellena de foie con salsa de boletuys y patatas gratinadas,
vino tinto rioja , Luis Cañas crianza 2001
trilogía de chocolate con chocolate caliente al momento,
crema de yogur con coulis de frambuesa,
cava, Anna de Codorniu Brut,
café e infusiones.
El baile
¡Fiesta!, ¡fiesta!, ¡fiesta!, y mucha alegría, los nuevos esposos derrochaban felicidad, sus padres también, y la transmiten a todo el mundo y como la pólvora, se extiende por la Fábrica de Harinas iluminando unas de las mejores veladas que hayamos vivido en mucho tiempo.

A las doce, un autobús, nos devuelve al hotel.

El día después
Pepe nos recoge en el hotel Amura y después de recoger a Conchita, nos lleva a su casa, donde habían dormido Sonia y Raquel.

Nos invitan a comer, con Pepe al mando de la cocina y entre él y Félix nos devuelven a la estación de Atocha, para, algo tristes, coger de nuevo el tren y regresar a casa.

Algunos días después
El día 27 siguiente, Maríamercedes, nos envía el siguiente e-mail:
A lo largo del tiempo he comprendido que la vida tiene un recorrido de un tren y en ese tren hay paradas, con sus estaciones y hay que aprovechar todas esas paradas para ver esos lugares tan maravillosos que nos presenta esa larga o corta vida que tiene cada uno.

La verdad es que en este trayecto, una de las paradas que con más ansia esperaba, era la boda de mi hijo. No sabéis como pensaba parar en ese lugar y todo lo que estaba preparando para bajarme en esa estación.

Al mismo tiempo, en ese viaje, que es nuestra vida, no se puede ir solo, no, no hay nadie en este mundo que se crea tan autosuficiente para hacer ese camino sólo, y si alguien lo cree así, creo y ese es mi pensamiento que es un ser estúpido por no querer compartir la alegría y la satisfacción que te dan todos los que te acompañan.

Pues sí, yo me baje en esa parada con mucha ilusión ... y la gente que me acompañó en la misma fue y ha sido tan maravillosa, que con creces me ha dado una lección de cariño que no correspondía a mi persona.

Era como la gente que esperaba a esa niña de esa película que se llamaba Polyana, ¿la habéis visto?, fue la primera vez que me dejaron ir sola al cine y que tuve dinero para ir a ver una película, la cuál se me quedó grabada de por vida. Pues, por eso me he acordado del tren, de ese tren, porque cuando ella vuelve de una operación, todo el mundo la espera, la acoge y le da todo el cariño.

Así fuisteis todos conmigo y con la familia que mi marido y yo hemos creado. Ese día, todos nos esperabais con esa cara de contento que daba gloria veros.

Ahora, no se que hacer.

Ha sido todo tan maravilloso lo que pasó en ese momento, que creo que no somos nadie, para recibir el cariño tan grande que nos disteis y que me dieron, porque un ser que va como de incógnito en esta vida para expresar sus sentimientos y que es mi marido, que, perdonadme, pero es un ser que tengo que elogiar desde aquí porque no llego ni llegaré nunca a su altura y que me supero, a mi y a muchos, me hizo llorar, pero los que compartieron conmigo y con mi familia esas palabras y que lloramos al unísono, eran...maravillosos.

Quizás valoro mucho a mi marido y sus palabras a mi me superaron y a alguno de vosotros no.

Comprendedme, porque claro soy su mujer y una mujer muy enamorada, pero da igual, al final, algo hizo Jaime que nos llegó a algún rincón de nuestro ser, que la cancioncilla cursi que habían preparado mis hijos recordado los momentos felices de su infancia, con su abuela, creo que a algunos nos toco esa fibra sensible que tenemos. Era como un cúmulo de sentimientos que nos hizo explotar.

Solo veía caras sonrientes, caras expresivas de cariño.

Las había, de los que tienen mucha facilidad para expresar sus sentimientos y los que hacían un esfuerzo por expresarlos, pero fue maravilloso.

Gracias a todos.

Sabéis que por circunstancias de mi vida nunca he tenido lo que es una familia normal, bueno una familia en la que hay un papá, una mamá y unos hermanos. Pero creo que en estos momentos de mi vida y con los años que tengo, doy por creces y agradezco, lo que tengo ahora. Pero la verdad es que ahora con 54 años cumplidos, todo lo que he envidiado cuando era pequeña, vosotros me los habéis dado.

Hay alguno de vosotros que no pudisteis asistir a esa ceremonia, pero que estabais conmigo en esos momentos apoyándome. Desde aquí, también quiero agradeceros todos vuestros sentimientos hacia mi en ese día.
Muchas gracias.
Maríamercedes

Madrid

26 junio, 2006

Crónicas malagueñas

Senderismo por la playa, de Riviera del Sol a la Cala de Mijas.

A lo lejos, Isabel y Paloma, quienes no se dejaron fotografiar de cerca.




Y para comer, ¡como no!, espetos de sardinas y jureles regados con cerveza, preparados por Felipe, de la Cala de Mijas, uno de los espeteros más reconocidos de la Costa del Sol, quién nos ha prometido para el próximo día, prepararnos su especialidad, ¡espeto de gambas!.

16 junio, 2006

Recuerdos de guerra

La abuelita decía que cuando el abuelito venía de una batalla y aparecía por la puerta con su “capote” echado y todo sucio, daba miedo verle. Venía con barba larga, moreno, bueno casi negro por el sol y tan sucio que una noche al llegar a casa y llamar a la puerta, la abuelita le cerro “la puerta en sus propias narices” pues la pobre no le reconoció.

Ella contaba que siempre vivían con una continua amenaza de que los moros invadieran Melilla y en los momentos más difíciles y con tanto “niño chico”, tenia unas cuerdecitas o cadenitas en las que los niños llevaban escrito su nombre y donde vivían por si había una guerra para que alguien, si los encontraba, supiera donde llevarlos.

Como son estas cosas. Cómo se van grabando en la cabeza de las personas. Ya que cuando nacieron mis niños todos llevaban una plaquita de plata con su nombre, dirección y teléfono colgando del cuello hasta que fueron bien mayores. Ahora lo pienso y seguro que fue la abuelita quién me metió esto en la cabeza.
Maríamercedes


13 junio, 2006

Y siendo muy niño se fue a la mili ...

08 junio, 2006

Cuatro generaciones









07 junio, 2006

Retazos del pasado


María Josefa Valentina Clavijo de la Vega, natural de Jerez de la Frontera, el día de su Primera Comunión..







Esta fotografía fue tomada por Pepín en la puerta de la última casa que vivió en Villa Sanjurjo. Llevaba uno de los vestidos antiguos de su familia.
Maríamercedes



En las horas fugaces de ventura
Cuando veas risueño el porvenir
Si anhelas que otro ser goce contigo
Nunca pienses en mí.

Más....en los largos días de tristeza
Cuando en silencio tengas que sufrir
Y no tengas a quien contar tus penas,
! Acuérdate de mí!
María Josefa Valentina Clavijo de la Vega

06 junio, 2006

1.922


17/03/1922
Merdeces Sisí Capdevila y en sus brazos, Petruqui Sisí Clavijo, fallecida ese mismo año de tosferina, descansa en el cementerio de Melilla de la Purísima Concepción.

05 junio, 2006

Crónicas malagueñas

Isabel, Susana, tía Conchita, Marta, tía Memes, Raquel y Cristina, en el paseo marítimo de la Cala del Moral


Comiendo en el paseo marítimo de La Cala





Manolo, a pesar de su gota, pescó, con un esfuerzo titánico, el mero de 7 kilos que nos muestra, contento y orgulloso, en la fotografía.

02 junio, 2006

Cosas de Melilla

Cementerio de la Purísima Concepción


01 junio, 2006

Cosas de Melilla




Después de la guerra civil, esta fue la última casa que ocupo nuestra familia en Melilla (foto superior), en la calle General Mola, justo enfrente de la Cruz Roja (foto izquierda).



Vivieron en la segunda planta, en la vivienda del mirador y los balcones señalados con flechas rojas en la fotografía.
Según mi mamá, el balcón señalado con la letra "A" correspondía a la habitación de Alberto.
Maríamercedes